Los pensamientos pueden causar desórdenes fisiológicos

Cada cambio en tu pensamiento produce una vibración en tu cuerpo mental, que cuando se transmite al cuerpo físico crea una actividad en la materia nerviosa del cerebro. Esta actividad en las células nerviosas produce muchos cambios eléctricos y químicos en ellas. Es pues la actividad del pensamiento, la que provoca estos cambios. 

La pasión intensa, el odio, los celos amargos, la ansiedad corrosiva, y los arrebatos de mal genio, en realidad destruyen las células del cuerpo e inducen a enfermedades del corazón, el hígado, los riñones, el bazo y el estómago.

Es un punto digno de destacar con cuidado, que cada célula del cuerpo sufre o crece, recibe un impulso de vida o una pulsión de muerte, de cada pensamiento que entra en la mente, porque tiendes a convertirte en la imagen de lo que más piensas.

Swami Sivananda